jueves, 27 de febrero de 2014

¿De qué te ríes?

Fuente: El Mundo 27/02/2014 ¡QUIA! Autor: Arcadi Espada

¿De qué te ríes?
EN LA inauguración del Congreso de Móviles de Barcelona, el Príncipe de España tuvo un encontronazo con un activista del independentismo. Apostado en la fila, le negó la mano cuando el Príncipe se la tendió. No fue espontáneo: las cámaras amigas estaban listas para grabarlo y el activista había planeado bien qué hacer y qué decir. Lo que no estaba planeado es que el Príncipe, una vez envainada su mano tendida, volviera sobre sus pasos y cometiera una serie de errores: tratar de amigo al activista («Yo no soy su amigo», le respondió crecido); pedirle que le diera la mano a pesar de sus discrepancias («No le doy la mano porque no nos deja votar»); responderle algo así como que esto no es asunto mío, lo que fue realmente pasmoso, y hablarle en catalán, porque el catalán como cualquier otra lengua se debe hablar por necesidad o cortesía, condiciones que no se daban allí. Como dijo donde Herrera el maestro Gómez Marín, cuando uno desanda sus pasos y se encara es para dejar despanzurrado al villano: pero no, dialéctica y estéticamente el Príncipe se marchó peor de lo que había venido, embarrado. No se comprende que personas a las que hay que dirigirse en tercera persona, que exigen la inclinación de las damas y que prohíben ser fotografiados con una croqueta en la boca se avengan a participar en un youtube pendenciero. Y que lo pierdan es ya puramente insoportable.
Los profesionales del desplante y el abucheo piensan que sus ofensas a los políticos se agotan en la persona violentada. Pero su ofensa alcanza también a todos los ciudadanos que han votado a ese político y/o se sienten representados por él. La democracia es delegación y también la violencia se ejerce por delegación. El pendenciero, que suele ser analfabeto, no tiene por qué conocer estas sutilezas, pero sus víctimas sí. Así que el Príncipe debe saber que muchos españoles se sintieron ofendidos con la ofensa, que no fue ni la única ni la más grave. Porque si de algo sirvió el incidente fue para reafirmar la calidad humana e institucional del presidente de la Generalitat, que lejos de lamentarlo, sonrió melifluamente, y estrechó la mano del activista con calor cómplice. Si el Príncipe hubiese tenido los reflejos de lanzarle a Mas un Presidente, perdone, ¿de qué se ríe? la frase habría alcanzado la altura y diseminación celestial de aquel Por qué no te callas de su padre. Pero es cierto que para ello el Príncipe habría debido tener enfrente a un colonizado verdadero.

martes, 18 de febrero de 2014

Hipocresía onusiana

Fuente: ABC 13/02/2014 Autor: Ramón Pérez-Maura

Hipocresía onusiana
¿Para cuándo la denuncia de la ONU de los abusos sexuales perpetrados bajo su bandera contra menores de edad?
COMITÉ de los Derechos del Niño de la ONU. Un organismo en el que en la actualidad casi la mitad de sus miembros representan países tan respetuosos con los Derechos Humanos como Arabia Saudí, Bahréin, Ecuador, Egipto, Etiopía, Rusia, Sri Lanka o Túnez. Este organismo manifestó en su último informe sobre Arabia Saudí una «grave preocupación» por el hecho de que en un colegio femenino en La Meca que fue pasto de las llamas en la madrugada del 11 de marzo de 2002 murieron 15 niñas y resultaron heridas unas 50. Según el Comité, el colegio «carecía de las medidas de seguridad adecuadas para niños». Pidió a los saudíes escuelas más seguras y formación del personal de emergencias. Perfecto... salvo que el Comité de la ONU que defiende a los niños olvidó mencionar que el «Comité para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio» (juro que así se llama la policía religiosa saudí) impidió la salida de las niñas de la escuela en llamas porque no cubrían su cuerpo de la forma exigida para prevenir el vicio. Que se mueran las niñas antes de que algún pervertido pueda excitarse viéndolas. Y ese Comité de la ONU parece compartir el criterio, porque no pidió anteponer la vida de las niñas al vicio saudí, sino mejorar la seguridad para que se queden dentro hasta que se pongan bien la abaya.
No puede haber la más mínima debilidad ante ningún caso de pederastia. Venga de donde venga. Bajo ningún concepto. Jamás. Y menos dentro de la Iglesia Católica. Dicho lo cual, la Iglesia ha hecho muchísimo más que ninguna otra institución internacional contra la pederastia en sus filas. Sólo en los dos últimos años completos del pontificado de Benedicto XVI 384 sacerdotes fueron apartados de su ministerio además de ser sometidos a la justicia ordinaria. Y más de medio centenar de obispos fueron jubilados antes de tiempo por no haber combatido este mal de forma efectiva muchos de ellos. Algunos casos se remontan a hace medio siglo –o más.
¿Cuántos casos hay de abusos sexuales de Cascos Azules de la ONU enviados a ayudar a los más débiles en guerras diseminadas por el mundo? Infinidad. La ONU ofrece datos desde el año 2007. Entre 2007 y 2013 se han denunciado más de 600 casos de violación y abusos sexuales, muchos de ellos involucrando a víctimas menores. Si alguien quiere hacerse una idea de lo que hablamos, que vea en la web la violación y agonía por Cascos Azules de un adolescente haitiano en 2011. Pero el Comité de los Derechos del Niño en la ONU no está para ocuparse de los actos como el de ese chico cometidos bajo bandera de las Naciones Unidas. Está para decir a la Iglesia Católica que debe promover el aborto en ciertos casos. Que es una forma muy peculiar de defender a los niños. Aunque abortarlos puede ser la mejor manera de protegerlos de la impunidad de ciertos hombres bajo bandera de la ONU.

domingo, 9 de febrero de 2014

Lantejuela sin La

Fuente: ABC   7/02/2014   EL RECUADRO   Autor: Antonio Burgos

Lantejuela sin La
Si Massiel tuviera ahora que ir a Eurovisión, no sé qué iba a cantar. Porque eso del "La, la, la" está absolutamente pasado de moda. Parece como si la Unión Europea hubiera dado una directiva para suprimir los artículos en la lengua española. Citaba el otro día que los cofrades le tienen declarada la guerra al artículo "la". Las cofradías no entran ya "en La Campana", sino "en Campana". Y a mí me suena a plaza del Arenal, a un toro que se encampana al salir al ruedo, cuando dicen eso de "Cruz en Campana a las 18:50". ¿Qué pasa, que a las 18:50 se encampana la Cruz de guía y no hay forma de que el hermano crucero que la porta la haga enfilar camino del Palquillo? Y también citaba la manía hispalense y "cofrade" (vamos, cofradiera, que es como se debe decir) que quita los artículos a pares a "la Puerta de los Palos": la dejan en "Puerta de Palos". Lo que a mí me da pretextom para añadir que para Palos, los que yo les daba a los modernetes que están haciendo degenerar de esta forma el habla sevillana.
Y como todo se pega menos lo bonito, esta manía de suprimir los artículos ha llegado hasta el Consejo de Gobierno de la Junta y a las páginas del BOJA. Vaya por delante mi saludo a los vecinos de La Lantejuela, que me parecen todos extraordinarias personas, no vayamos a tenerla. La Lantejuela debe de ser un lugar feliz, donde no tiene que haber paro y reina el pleno empleo, donde los pájaros cantan y las nubes se levantan. Porque según leemos en la Prensa, el principal problema que tenía La Lantejuela era su nombre. Que a los de La Lantejuela no les gustaba que le dijéramos La Lantejuela, que aquello es Lantejuela a secas, sin el "la, la, la" de Massiel. Y lo han pedido así a la Junta, y la Junta lo ha aprobado. Hombre, ya puestos, también podían hacer buscado otro nombre. Pues Lantejuela es un nombre de noble y respetabilísimo pueblo que lleva incluida la errata. Me pongo lo que sea a que de diez sevillanos que pronuncian "Lantejuela", ocho lo hacen mal, al llamarla "Lentejuela", como si fuera diminutivo de lenteja o uno de los redondelitos brillantes que decoran los trajes de fiesta de las señoras.
Y admitida Lantejuela como la forma correcta de llamar al pueblo, pido los honores del BOJA para El Arahal. Que no es El Arahal, como lo llamamos todos, sino simplemente "Arahal". Y que a lo mejor ha tenido ya los honores del BOJA para cambiar el topónimo que va a costar mucho trabajo que los sevillanos no llamemos "El Arahal". Hasta en las sillas de "Campana" (sin artículo) se habla de El Arahal (con artículo). Y citada otra vez a La Campana cofradiera, me pregunto: ¿qué va a pasar con el pueblo de La Campana? Si, el pueblo del chiste del costalero alquilón de pueblo del tiempo de los profesionales, que oyó al capataz en la calle Javier Lasso de la Vega:-
-- Vámonos otra vez, valientes. ¡A ver si llegamos de una sola chicotá hasta La Campana!
Y el costalero (de Olivares creo que era) levantó el faldón y le contestó:
-- ¿Hasta La Campana de una chicotá, miarma? ¿No podìamos por lo menos parar en Carmona, que voy eslomaíto? -
A imitación de Arahal y Lantejuela, seguro que La Campana, La Rinconada y La Luisiana le querrán quitar el artículo a su honroso nombre. Como se lo querrán quitar La Puebla del Río o La Roda de Andalucía. Ni te cuento el "overbooking" de quitar artículos que puede haber en el BOJA: El Cuervo, El Castillo de las Guardas, El Rubio, El Saucejo, El Real de la Jara, El Pedroso, El Garrobo. ¿Qué espera Las Cabezas para ser sólo Cabezas? Verá usted como cunda la moda de que es más elegante decir Saucejo que El Saucejo y Pedroso que El Pedroso... La que sí quedará bastante resultón sin artículo es La Luisiana:-
-- ¿De dónde es la novia de tu niño?
-- De Luisiana.
-- Ah, americana de Luisiana...
-- No, hija: es luisianera, del pueblo de La Luisiana.
-- Hija, pues ni que se hubieran llevado a Nueva Orleans el pueblo de la novia de tu niño...